El gran Vázquez

El gran Vázquez me gustó por varias razones. 

• Retrata una España -que yo no conocí, todo hay que decirlo- llena de timadores de poca monta que se me antoja realista. 
• Reivindica al dibujante de cómic como una persona que buscaba básicamente entretener, lejos del barniz intelectual que parece obligatorio en los tebeos de hoy. 
• Huye de malditismos aunque es una historia de decadencia nada elegante. 
• No es el típico biopic mitificador: queda claro que Vázquez era un capullo con las mujeres. 
• La imagen que da de la empresa Bruguera nos hace sonreír: por lo que tiene de vigente.  
• Por otra parte, nos hace llorar viendo que existió un mundo en el que a los artistas se les hacía firmar contratos renunciando a su obra casi de por vida. ¿ Dónde estaban entonces todos estos acérrimos defensores de los derechos de autor?. Tengo la sospecha de que haciendo firmar esos contratos leoninos a los pobres dibujantes.